CUANDO DAS A DIOS EL PRIMER LUGAR EN TU VIDA

David era un joven que se dedicaba a cuidar las ovejas de su padre, mientras se encontraba a lo lejos haciendo su labor, él se la pasaba adorando y alabando a Dios.

Él hacía su trabajo con mucho carácter y responsabilidad, cuando un oso o un león tomaba una de las ovejas, él lo agarraba por la quijada, le quitaba la oveja y lo mataba.

Era un joven y entregado, pero sobre todo, amaba a Dios. David no solo cuidaba las ovejas de su padre, sino que la alabanza y la adoración estaban siempre de continuo en su boca.

Este joven de muy buen proceder seguía  haciendo su trabajo con amor y carácter, él no se preguntaba ¿Por qué yo? él en lugar de quejarse alababa y adoraba a Dios. 

Así llegó el día donde Dios envió al profeta Samuel a casa de Isaí, su padre, para ungir a uno de sus hijos como rey. Isaí alistó a todos sus hijos menos a David, porque él consideró que David no estaba capacitado para participar en la ceremonia.

Pero que bueno cuando das prioridad a Dios. Porque David en lo profundo del desierto donde estaba cuidando las ovejas de su papá, allí además de hacer con mucha responsabilidad su trabajo, también le daba el primer lugar a Dios en alabanza y adoración.

Y qué piensas que pasó? Pues mira lo que pasó, Dios lo vio en ese desierto donde se encontraba y lo mandó a buscar.

Entonces dijo Samuel a Isaí: ¿Son éstos todos tus hijos? Y él respondió: Queda aún el menor, que apacienta las ovejas. Y dijo Samuel a Isaí: Envía por él, porque no nos sentaremos a la mesa hasta que él venga aquí.

1 Samuel 16:11

Donde nadie lo vio, ni siquiera su padre lo tomó en cuenta a la hora de alistar a los hijos para la ceremonia lo consideró capaz, pero allí Dios lo vio y lo levantó. Dios lo mandó a buscar y lo sentó en la mesa, donde los demás creían que él no estaba capacitado para estar. Así obra Dios con los que lo aman y lo honran.

Bendiciones múltiples pueblo amado del Señor, Dios te bendiga más 🙏🙏.