José es llevado al palacio

En casa de Faraón

Es importante que todo soñador que carga un sueño de Dios conozca cuál es su destino final, O sea, que sepa quien es, de donde viene, y hacia dónde quiere llegar. Porque si sabe esto, en cada una de las paradas que se presenten durante el camino, sabrá que hacer y cómo actuar en cada evento presente, y de este modo el trayecto para la llegada a su destino final, le será mucho más placentero, porque no está enfocado en los eventos del camino, sino en el lugar hacia donde quiere llegar. 

Cuando tu mirada está puesta en estos puntos antes mencionados, en cada parada y en cada evento, tú estás buscando la oportunidad que hay en los mismos, para avanzar y llegar a aquel lugar. Ninguna parada ni evento te puede confundir, porque tú estarás firme y enfocado en quien eres y para donde vas. 

Y le dijo José: Esta es su interpretación: los tres sarmientos son tres días. Al cabo de tres días levantará Faraón tu cabeza, y te restituirá a tu puesto, y darás la copa a Faraón en su mano, como solías hacerlo cuando eras su copero. Acuérdate, pues, de mí cuando tengas ese bien, y te ruego que uses conmigo de misericordia, y hagas mención de mí a Faraón, y me saques de esta casa. Porque fui hurtado de la tierra de los hebreos; y tampoco he hecho aquí por qué me pusiesen en la cárcel.

Génesis 40:12-15

José sabía quién era y hacia donde quería llegar, a él ninguna parada ni evento lo pudo detener, porque él se mantenía enfocado en aquel lugar que era su destino final. Él aprovechaba cada oportunidad que pudiera servir para avanzar en su camino, él no se acomodaba, ni se acobardaba, porque él conocía aquel lugar donde debía llegar.

Dios te saca de los lugares que nada aportan al cumplimiento de su propósito, y te conecta a las personas correctas, para que te impulsen a tu llegada. Por eso nunca te debes apegar al pasado, ni sufrir cuando eres movido de lugar, porque si cargas el propósito de Dios, es Él quien te guiará y conducirá hasta el cumplimiento del mismo. Es a su modo que Dios te empuja, muchas veces de formas dolorosas para nosotros, pero siempre para nuestro bien y el bien de los nuestros.

El camino no es fácil, pero hay que caminar,  tienes que comprender que no estás solo, que Dios está contigo, y entendido esto, llegará con éxito a ese lugar que Él te ha prometido. 

Entonces Faraón envió y llamó a José. Y lo sacaron apresuradamente de la cárcel, y se afeitó, y mudó sus vestidos, y vino a Faraón. Y dijo Faraón a José: Yo he tenido un sueño, y no hay quien lo interprete; mas he oído decir de ti, que oyes sueños para interpretarlos.

Génesis 41:14-15

Así fue José movido, sacado de la cárcel y llevado a Faraón, para interpretar los sueños que él había tenido.

Dios pone en ti lo que Él quiere que lleve, te prepara desde el inicio, y te mueve como lo tengas que hacer, para que sean cumplidos los sueños de Él que hay en ti. Es bueno que entiendas, que si Dios puso un sueño en ti, Él también se va a encargar de hacerlo cumplir. Solo debes hacer como Él quiere, y durante el camino mantenerte enfocado en lo que Él te dijo, y Dios se encargará de todo lo que pase en trayecto del cumplimiento de sus planes.

Por tanto, provéase ahora Faraón de un varón prudente y sabio, y póngalo sobre la tierra de Egipto. Haga esto Faraón, y ponga gobernadores sobre el país, y quinte la tierra de Egipto en los siete años de la abundancia. Y junten toda la provisión de estos buenos años que vienen, y recojan el trigo bajo la mano de Faraón para mantenimiento de las ciudades; y guárdenlo. Y esté aquella provisión en depósito para el país, para los siete años de hambre que habrá en la tierra de Egipto; y el país no perecerá de hambre.

Génesis 41:33-36

José interpretó los sueños del Faraón, dio a cada uno su significado y luego le recomendó algunas cosas para el bien del país. Todo eso pareció muy bien al Faraón, la interpretación de los sueños, como lo recomendado, por lo que le pareció que no había otra persona mejor que José, para ocupar la posición del varón prudente y sabio que él había mencionado.

Dios te da la sabiduría necesaria para cada parada del camino, y para cada evento que se pueda presentar. Porque Dios es quien te lleva, y Él te guiará hasta el destino final, el cumplimiento de su propósito.

Tú estarás sobre mi casa, y por tu palabra se gobernará todo mi pueblo; solamente en el trono seré yo mayor que tú.

Génesis 41:40

Cuando Dios tiene planes contigo todo lo que te pasa, Él lo utiliza para llegar al cumplimiento de los mismos, porque Dios cumple su palabra. Los hermanos de José quisieron salir de él, pero lo que hicieron fue ponerlo en el camino correcto para llegar al lugar que Dios quería que él llegue.

Los planes de Dios se cumplen, ni la cisterna, ni la mujer de Potifar, ni la cárcel, pudieron impedir que se cumpla el propósito de Dios en José.

Así que ten por seguro que llegarás al lugar que Dios te ha prometido, no importa quien se interponga con el propósito de impedirlo, si Dios lo dijo se cumplirá. No te dejes intimidar por los contratiempos, avanza creyendo en aquel que te hablo, porque Dios usará cada uno de los obstáculos como escalón para llevarte al cumplimiento de su promesa. 

Entonces dijo José a sus hermanos: Acercaos ahora a mí. Y ellos se acercaron. Y él dijo: Yo soy José vuestro hermano, el que vendisteis para Egipto. Ahora, pues, no os entristezcáis, ni os pese de haberme vendido acá; porque para preservación de vida me envió Dios delante de vosotros.

Génesis 45:4-5

El sueño de José fue cumplido, sus hermanos llegaron a él y se inclinaron hasta la tierra, porque ese no era sueño de José, sino el sueño de Dios en José, para salvación de muchos. Porque Dios conoce los tiempos, El ve lo que nosotros no podemos ver si no es por Él, y por eso Dios revela a nuestro corazón en sueño o de cualquier otra forma, lo que ha de venir y cómo solucionarlo.

No culpes a los instrumentos que de una manera u otra han provocado algún movimiento en tu vida, porque solo son personas, y en ti solo va a suceder lo que Dios decida. José sufrió mucho en el trayecto para llegar al Faraón, pero él no culpó a sus hermanos que lo pusieron en ese camino, vendiéndolo como esclavo, porque él comprendió que todo eso era el plan de Dios.

Cuando entiendes esto, te mantendrás con salud espiritual, nada dañara  tu corazón y el propósito de Dios será cumplido en tu vida. El plan de Dios nunca será abortado, porque por más que el enemigo quiera dañar tu vida espiritual enfermando tu corazón, no lo lograra, porque tu sabes que depende de Dios, y en ti sucede lo que Él dice. Por más que el enemigo quiera hacer abortar el propósito de Dios en tu vida, si tu te mantienes enfocado en él, en vano será su afán, porque se cumplirá en ti tal y como Dios dijo.